He disfrutado de la compañía, y no he perdido la
soledad.
He vomitado tal vez más de mil palabras,
y cuando he dejado de esperar,
he empezado a no sentirme sola.
He descansado.
Y me he impulsado hacia mí misma.
Escrito por Lis Amélie con anterioridad a 2011.
Ahí estás. Hazme un hueco de vez en cuando para que podamos conversar.
ResponderEliminarClaro que sí.
Eliminar